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Auschwitz Viajamos diariamente días y noches nosotros los planetarios Y el tiempo se nos desaparece tumbado en su propio equipaje Testigos mudos de la claridad grisácea de un amanecer frío Anhelando que el destino nos depare la esperanza oculta En el silbato de la locomotora perdiéndonos hacia la incertidumbre. <<¡Hay una señal que dice Auschwitz!>>, oímos como un lamento triste El tren avanza parsimoniosamente como avisándonos que la cómoda vida Pronto se hallará entre kilómetros de cercas espinosas y verdugos vigilantes Y en nuestras miradas la andrajosa angustia bajo la luz del crepúsculo incierto De cuando en cuando ya vemos los cuerpos oscilando colgados de una cuerda. La inmensa atrocidad se rasga en las voces de mando que escuchamos fuerte Gritos escandalosos y bruscos llevándonos el aliento de nuestro hostil futuro Antes de que nos obligaran ásperamente a asesinarnos el sentido del Hombre Golpeado ahora por otros hombres de impecables trajes y adúlteras lenguas Que proferían con aire de superioridad ser la nueva raza de los imbéciles. Un trozo de pan seco es nuestro único alimento durante cuatro pútridos días Desde allí ya no recordamos una alegre tarde o una tibia noche sin llanto y duda Las SS se encargaron de marcarnos la piel con sus sádicos deseos de poder y gloria Obligándonos lentamente a sufrir trabajando en las cámaras de gas y en los crematorios Jugando con nuestras vidas hasta el fatal día en que nos convertirían en nuevos muertos. .......................... Atraer la vida Somos incapaces de entender nuestra auténtica realidad <> El significado como arena entre las temerosas y temblorosas manos escapa Y cabizbajo entre los uniformes impecables y relucientes de altos oficiales Se confunde con nuestro aspecto sucio y mugriento… con nuestra angustia Frente al dedo de una siniestra mano indicando hacia un lado o hacia el otro Hacia el forzado trabajo o hacia el engañoso baño de una segura muerte. Abandonemos al río silencioso de la clarividente historia y dejemos por única vez De resistirnos a la terapia de la existencia durante el brioso camino hacia la otredad El bello atardecer nos atraerá el sentido del <> seleccionándonos Una pastilla de jabón y una lluvia… de verdadera agua nos librarán del siniestro humo …allí flotarán miles de nuestros amigos elevándose hacia el alto cielo… sin embargo. ........................... La desinfección va por dentro Desinfectarnos es despojarnos de nuestras superficiales pertenencias Las SS nos ayudaron extendiéndonos sobre el suelo limpias mantas Allí depositamos todos nuestros objetos de valor: relojes y joyas Anillos de matrimonio y medallas y amuletos de oro y plata y todo También nuestra dignidad y alegría y nuestra libertad y porvenir. En esos instantes debemos sostenernos en lo que nos orienta la vida Frankl conservaría el manuscrito de un libro científico <> Tú conservarías el <> a tus amados hijos y amada esposa Él conservaría <> para soportar cualquier cómo Yo conservaría lo que soy y lo que podría llegar a ser <>. Nosotros borraremos todo vestigio de vida pasada si el presente nos patea Nos desnudaremos completamente en esos dos minutos contra el reloj SS Nos quitaremos también los zapatos el cinturón las gafas y el braguero La desinfección o es total o simplemente nos sirve para volvernos neuróticos Y la alienación nos latigará la mente sin reparar en nuestro autoconocimiento. ......................... La desnuda existencia La existencia desnuda reacciona contra la desnuda existencia Una cosa es vincularnos materialmente con las pasadas cosas Y muy distinta cosa es la de conservarnos desnudos a la existencia Un rato después igual escucharemos los látigos… inevitablemente. ....................... A veces no sabemos cómo Seguramente con tanto automatizado dolor las ilusiones serán vanas Y efectivamente nos embaucará un profundo y macabro humor crudo Empero el asombro filosófico y esencial de nuestra existencia ahora vacía Se mantiene intacto en nuestro corazón aunque atribulado late tibiamente Aún en la fría y horrible y pestilente y nefasta crueldad de la falsa Auschwitz Porque el jardín del mundo interior guarda en secreto a todos los dioses. Lo primero que comprobaremos es claramente que nos mienten los libros Y que es la inteligencia la que se adapta a la práctica teórica y reconstruye Posibilidades a pesar de las impuestas limitaciones que otros impondrán Neciamente apretujándonos como sardinas en lata y como ovejas en sacos Porque el jardín del mundo interior guarda en secreto a todos los dioses. Es cierto que el frío cuela hasta la médula de nuestros debilitados huesos Y que nos cubrimos con nuestros propios zapatos cubiertos de rancio lodo O que por falta de infame espacio nos dislocamos los brazos para dormirnos Y conciliar el sueño… un sueño que trae alivio y fugaz olvido durante pocas horas Porque en la mañana el grave presente nos adiestra aunque ignoremos el cómo. ............................. En el lagar del alma Todos quedamos anclados alguna vez en nuestros destinos La alegre muerte desde que nacemos es lo más triste y sólido Impensados el suicidio nos parece una desesperación ingrata En el fondo… nos acostumbramos a perder el miedo a la parca Permitamos que nos finjamos más jóvenes y los autoarañazos Nos produzcan un rostro más lozano y un corazón más áspero Quien tiene un miserable aspecto… está por dentro y por fuera Tan jodido y enfermo y demacrado e incapaz de perder la razón A no ser que no tengamos ninguna griega razón que perder Y nos postremos en viva oración como cadáveres sin rostros Hombres momia prisioneros de la más feroz condicionalidad Desnutridos en las palabras desvanecidos en el lagar del alma. ............................ La apatía de nuestro siglo Caminamos sonámbulos en las duras calles de la especie La muerte emocional es una tortura interior intensificada Añoramos el útero hogar que nos consumía la nostalgia Antes de extender los brazos y gritar las primeras lágrimas Nos preparamos para la oscura marcha en el primer albor Alineados rasgamos el silencio con el grito abatido y golpeado Tras la anterior noche enferma por el vapuleo del embotamiento Que nos deprime los sentimientos y nos causa fuertes heridas Intentemos zafarnos del apático trabajo en esta crasa ilusión Impertérritos curémonos las salpullidas heridas de la niñez Y en plena agonía impasibles cada sucia y escena pretérita Arrojémosla lejos sin apegarnos a esa inmunda historia La apatía de nuestro siglo tiene el siniestro ruido del cadáver Que ha sido arrastrado por los cortos escalones de la vida Sin haber levantado la mirada hacia la continuidad del tiempo A través de la única aguja que apuntaba eternamente al sol. ............................ Lo que nos duele Lo que nos duele es la insensibilidad como hábito Ese frío caparazón que construimos gracias al olvido Y que actúa como un íntimo escudo egoísta protector Del auténtico ser que ocultamos como un extraño Que apedreamos innecesariamente contra el cuerpo Como quien feliz juega a un juego macabro y burdo Ejerciendo un señorío que nos permite el duro placer De castigarnos inmerecidamente el corazón de insultos. ......................... El insulto nos desvanece “Los cerdos” como nosotros carecemos de espíritu Dice el refrán reflejo de los guardianes de las SS Mientras cavamos con las manos frías una zanja En un bosque helado para tender cañerías de agua “Hijo de perra” te haré cavar la tierra con los dientes Nadie puede llegar tarde en la cola del mísero trabajo Todos estamos listos para morir en cualquier minuto A fuerza de unos cuantos puntapiés certeros y seguros A veces cada paso dado es nuestra verdadera tortura De la nada a los caídos a mamporrazos indiscriminados Un cerdo Kapo nos golpea inmerecida e indignamente Y estampa en nuestros rostros cierta indignación moral El matón insulto desvanece la realidad ante nosotros Nos acostumbra a una amortiguación autodefensiva Todos nuestros esfuerzos es conservar un día más La noche y el día y un respiro de alivio porque vivimos. ............................................ Los sueños y la realidad Los sueños son forzados a la interioridad primitiva Afloran como deseos y aspiraciones incumplidas Soñamos con el pan los pasteles y los baños termales Soñamos el amor antes que el contraste nos hunda El espejismo de nuestros dulces sueños es terrible Nos despierta de los fuertes gemidos de la rutina Y nos devuelve la velada mirada hacia la realidad Esa horrible fase cuando ningún sueño es viable Los sueños y la realidad se aúnan en agua y aceite Con rapidez pierden la noción de pulcra identidad Para tornarse a niveles primitivos del alma humana Y desde allí… con una mueca de sarcasmo perderse. ....................... Una escena infeliz Toda nuestra vida psíquica gira en torno al hambre y sed Cuando malnutridos predomina este instinto primitivo Empero el plato favorito estaría aún lejos en el futuro Imaginándose a sí mismo pleno desde esta escena infeliz Aún hoy mucha gente vive de una ración de sopa aguada Y de un minúsculo pedazo de seco y desabrido panecillo Empero la idea es justamente ir matando lentamente Con una dieta anímica y física deplorable e inhumana Éramos esqueletos disfrazados con pellejos y andrajos Y ya nuestros cuerpos se devoraban raudos a sí mismos Indefensos no solíamos durar mucho y eras el siguiente Encerrados tras la eléctrica alambrada de espino podridos Porque ya se nos agota la vida con las meras ilusiones Y nos quedan las luchas de voluntad de un hambriento Comerse la avara ración diaria de pan inmediatamente O suministrarla en varios trozos y demorarnos la muerte. ................................. La existencia no-erógena La existencia maltratada en el fiero campo Muestra la tesis contraria al psicoanálisis En los sueños desaparece el deseo sexual Los deseos inhibidos son fusilados al azar. ................. Asentimentalismo La vida sentimental disminuye para salvarse el pellejo Y todo antiguo recuerdo no es más que fantasmas Mirando las calles, las plazas y la casa… de la infante Morada que regresa del otro mundo como infamia Contemplando el paisaje humano con atroz cinismo. .................. El sentido del optimismo La política y la religión resulta un lujo superfluo En crudos instantes de vacío emocional y fisiológico La hibernación atinge no sólo nuestros faltos cuerpos También nuestras finas esperanzas en un precoz futuro No obstante improvisamos ilusiones reales y optimistas En torno a realidades imaginarias Encuentros amorosos Placenteras lecturas ¡Bellas! Y fuertes relaciones familiares… Juegos en las limpias plazas Con los niños De todo El mundo. ............................ “¡Ay de los vencidos!” A veces oímos voces profundas Desde nuestra interioridad Que presagian la liberación de nuestro espíritu Del yugo De una sociedad construida Sobre la frágil base Que áspera Ahora predomina Sobre la naturaleza De lo desconocido. ........................ La huida hacia el interior de la libertad Nuestra profunda vida espiritual no es intelectualismo Parece más bien la mayor sensibilidad nuestra libertad Mínimamente entristecida en su intimidad y mismidad Aunque el triste cuerpo cadavérico exprese lo contrario La riqueza interior ahora aflora como un dios rebelde Y ayuda a abstraemos del terrible territorio maniático A que la vilidad ha obligado a habitarnos como paradoja A veces aún los más fornidos no sobrevivirán esta nada Y la fría alba terminará de carcomer su raída confianza Tropezándonos tiesos con las piedras y las gélidas pozas Hundiéndonos más incluso a tientas hacia el gris afuera Con farsa marcialidad y a culatazos de malparidos rifles Con la boca desprotegida y el alma alienada de sí misma Olvidada por la dureza de los funestos golpes de la lucha. ............................ Sellados en el corazón “Los ángeles se abandonan en la contemplación eterna de la gloria infinita”. El amor se levanta la vista al cielo y se diluye en las estrellas Real o irreal sentimos y anhelamos su mirada franca y cálida Y así nos aferramos a la imagen de la primera mañana del día Que nos recuerda que la oscura franja en nuestra embriaguez Es sólo un pensamiento petrificado por los palos de la vida La noche del alma aún es la meta última de todo ser humano Que comprende la sólida verdad dispersa en tantos poemas En tantas canciones que intentan comunicarnos ese amor Saboteado y despojado de sentido en los actuales comercios La felicidad se saborea si contemplamos el rostro de la muerte Cuando se ha perdido todo… nada se ha perdido en realidad En nuestra invisible casa vive el auténtico ser que nunca cesa De gritarnos al oído a toda prisa que el fantástico y serio mundo No nos anestesiará ni entumecerá ese silencio orbital que el alma Exhibe espiritualmente como la muerte al amor sellado en el corazón.